ETORKIZUNA

HAURREN ETORKIZUNA BETI DA ORAINALDIA,
BIHAR BERANDU IZANGO DA

DIOS

Creen en Dios los que menos motivos tienen.
El hombre es un ser culpable desde el nacimiento y Dios le da la razón en su pesimismo, sobre todo si te ha tocado nacer en un poblado de chabolas o en un barrio periférico y pasar hambre desde que tu madre te daba a roer una teta seca y te puso a trabajar en cuanto pudiste ponerte de pie.
Rafael Chirbes

FOTÓGRAFO

FOTÓGRAFO

LÓGICA

Si Dios existiera no habría mal en el mundo.
Como hay mucho mal, Dios no existe.

jueves, 5 de mayo de 2016

POESIA FINA

ESTA SEMANA SANTA HE HECHO UN VIAJE A ETIOPIA Y HE CONOCIDO A UN INSIGNE CABALLERO DE BARACALDO, HERMANO JOSÉ FELIX, QUE ME HA ENSEÑADO ESTA POESIA
El conde de Bragamonte,
que jamas enemigo tuvo,
usaba la picha como espada,
y los cojones como escudo.
Cierto dia, cabalgando
por los montes de Toledo,
se encontro una hermosa niña,
que se estaba metiendo el dedo.
El conde, admirado,
de sus lindos muslazos,
se bajo del caballo,
y la echo tres polvazos.
La dama defendiose como pudo,
pero el conde dijo:
¡otra ronda!
y la metio por el culo.
—– o —–
¡Oh, Don Juan de la Cebolla!,
¡Cuán larga tenéis la polla!
Razón tenéis Doña Inés,
pues me llega hasta los pies.
No vengo a veros sino a joderos.
Don Juan, Don Juan, la puntita nada más,
pues soy doncella…
¡Callad puta plebeya!, que os meteré toda ella
¡Y los huevos detrás!
Apretad, apretad,
apretad sin compasión,
que hace mas de un mes
que no pruebo salchichón
 —– o —–
Se fue Don Juan altivo,
saltando de pino en pino,
y a no mucho de camino
se encontró con tres doncellas,
putas, claro, todas ellas.
¡Oh Don Juan, qué gran galán!
Sóis vosotras también bellas
¿Cómo os llamáis?
Yo, Griselda de Foulláis
Yo, Jimena Cimbrelán
Yo, Fernanda de Coñuás
¿Y tú, Don Juan, qué nos harás?
Yo, la regla del compás:
os la meto por delante
y os la saco por detrás.
—– o —–
El conde, totalmente angustiado
al ver que la moza había palmado,
con la polla aun tiesa,
se escapó por la dehesa.
A lo lejos se divisa
algo rubio y sin camisa,
es una chica muy potente,
de pechos duros y turgentes.
Va el conde y la avasalla
y se la lleva a la muralla.
Pero aquí no acaba todo,
hay sorpresa ¡y de qué modo!
La moza, al desnudarse
saca un rabo alucinante.
El conde se ha sorprendido
al ver ese cacho pepino.
Obligado a darse vuelta
le agachan piernas abiertas
Y en el culó le han clavado
ese pene empalmado.
Ahora el conde viste faldas,
y el vello depilado.
Ha encontrado su destino
y de mujeres se ha olvidado.
—– o —–
Perdonad, divina dama
que relaje la etiqueta,
mas tengo la tentación
de morderos una teta.
¡Caballero! ¡Como osais !
respetadme, soy una dama,
Pero…desabrocharos la bragueta
que os lustro la banana.
Señora, disculpad mi osadia
si he perdido la postura,
Mas levantad esa fina falda
que os parto la costura.
¡Oh! mi amado caballero,
admiro vuestra destreza,
pero os pido me metais
solamente la cabeza.
¡Oh! Señora idolatrada
Lo lamento, mil perdones,
La cosa no tiene remedio:
os clavo hasta los cojones.
Os perdono mi caballero
y hacedlo con disimulo.
Eso si, os lo suplico
sacadme el dedo del culo.
Basta ya, señora mia
basta ya de meta y ponga,
pareced habeis agarrado
lindo gusto a la poronga.
Seguid, seguid caballero
que con este ya van siete,
que luego agacho suavemente
y me rompeis el ojete.
Yo continuare Condesa
mientras su gusto lo exija,
y os seguire echando polvo
hasta que aguante la pija.
Bien se, querido mio
que eres un hombre de notas,
metedmela mas adentro
metedla hasta las pelotas
Que os parece mi amada
si continuamos luego el juego,
yo os hago la mineta
y vos me chupais los huevos.
—– o —–
¡Cojones!, dijo la marquesa,
poniendo las tetas sobre la mesa.
Y ahora ¿con quién culeo
si sólo maricas veo?
Yo soy Juan de la Cosa
que tengo una picha hermosa.
Yo soy don Juan Tenorio
que tengo la picha más grande
de todo este territorio.
La marquesa murió de dicha
de los diez metros de picha
que la metió don Rodrigo
más abajo del ombligo..